Fuente | http://hippiehousewife.blogspot.ca/ |
Los materiales que necesitas son:
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- Pintura de dos o más colores.
- Cinta adhesiva grande.
- Un folio.
Para montar la actividad:
- Colocamos un folio blanco sobre la mesa de trabajo. Servirá para que pueda verse mucho mejor el contraste de colores. Este folio no se va a manchar.
- Después dentro de la bolsa ponemos un poco de pintura de un color a un lado y de otro al otro.
- Cerramos la bolsa y la colocamos sobre el folio blanco fijándola con la cinta adehsiva para que no se mueva. ¡Procurad que la bolsa de congelación esté bien cerrada y no contenga aire!
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Ya veis que las posibilidades que presenta esta actividad son muchísimas. Si jugamos con colores primarios, es una buena forma de enseñar a los niños los colores resultantes de la mezcla. También podemos dibujar en la pintura, hacer surcos, pintar letras, números, nuestro nombre... ¡Es una actividad que merece la pena poner en práctica!
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